AMBOSELI SOPA LODGE

Sabor masai

Amboseli Sopa Lodge se encuentra situado en el exterior del Parque Nacional de Amboseli, a 20 minutos de la puerta este, Kimana Gate, se encuentra este agradable lodge envuelto en un maravilloso jardín de 80 hectáreas de la increíble naturaleza africana. Nairobi se encuentra a 250 kilómetros, 4 horas de carretera.

Amboseli Sopa Lodge cuenta con 83 habitaciones, todas ellas construidas como bungalows adosados con un estilo muy africano tanto en el exterior donde destaca un delicioso porche, como en la decoración interior. Las habitaciones son espaciosas y ofrecen todo lo necesario para un buen descanso, amplias camas de obra con mosquitero, grandes ventanas que dejan entrar la estupenda luz del lugar, pero mal orientadas hacia el camino, colores ocres y cremas en las paredes y baño completo con una buena ducha. También encontraremos en ellas un par de butacas tanto en el porche como en el interior de la habitación, un pequeño escritorio con su silla, una pequeña caja fuerte electrónica y un enchufe universal en el cuarto de baño. Como cortesía el hotel ofrece un par de botellas de agua en la habitación y amenities para el baño, aunque eso no quita que echemos en falta el minibar, la cafetera tan normal en estas tierras y el secador de pelo (en recepción).

De las 83 habitaciones, 40 tienen dos camas queen size, de las que seis se pueden comunicar, con lo que son ideales para familias, y veinticuatro se pueden convertir en triples, 20 habitaciones tienen una cama king size, dos de las cuales están adaptadas para minusválidos, 22 tienen una cama queen size, y hay 1 estupenda suite luna de miel.

El vestíbulo es una zona abierta construida en el mismo estilo masai que el resto del conjunto y que sirve de zona de paso entre los distintos elementos del hotel. A un lado del mismo encontramos la recepción, diseñada como la entrada de una choza típica masai. En el lado contrario encontramos un mercado de artesanía masai, que es propiedad de la comunidad local y la tienda del hotel. Y entre ambas zonas una pasarela que discurre sobre un pequeño estanque con peces, además de llevarnos al restaurante y al bar, nos dirige a una de las sensaciones de Amboseli, la vista del Kilimanjaro.

El restaurante Kibo recuerda a una gran choza masai por su forma circular. Su techo de paja y las enormes cristaleras que lo abren al exterior, hacia la montaña, son todo un acierto, al igual que su enorme chimenea interior. La terraza exterior es toda una delicia, y por las noches en frente de ella hay una estupenda zona con sillas y un pozo de fuego de carbón que hará la delicia para aquellos que deseen alargar un poco más la velada.

Es un establecimiento que nos gusta por su fuerte sabor étnico africano y sus estupendas instalaciones. Obviamente no es el mejor establecimiento de la zona, pero cuenta con una excelente relación calidad-precio. Si tuviéramos que catalogarlo desde nuestro punto de vista occidental, estaríamos hablando de un buen y agradable hotel de 4 estrellas. Hay que tener cuidado para no dejar nada fuera de la habitación, en el porche, y cerrar bien las ventanas y la puerta, pues los monos suelen hacer de las suyas.
Nuestra opinión…

El bar Mawenzi, enfrente del restaurante, está presidido por gran chimenea central y con una construcción similar al restaurante, con techos altos, abierto al exterior por una gran cristalera, y diáfano, han conseguido hasta cuatro ambientes diferentes, pues a la zona de la barra hay que sumarle una zona de mesas y sillas en madera maciza llena de tallas de madera, lanzas y escudos masais, una zona de sillones y mesas bajas en la parte opuesta, y una zona para la televisión (no hay en las habitaciones) entre ambas. El conjunto es muy agradable.

Existen otros dos bares, el bar de la piscina, y bar de Hemingway. Este último está dedicado al escritor y en sus paredes se encuentran numerosas fotografías de sus días de caza, pues el lodge se encuentra a muy poca distancia de donde Ernest Hemingway vivió mientras escribía su famosa novela “Las nieves del Kilimanjaro”. Se encuentra situado en un alto, a unos doscientos metros a la izquierda de la recepción, lo que le confiere unas buenas vistas. Su parte inferior es una cueva natural, que por las noches se convierte en mirador, puesto que mangostas y hienas acuden puntuales a su cita con la comida que les sirve el personal del hotel. Como curiosidad destacar que esta diseñado con la forma de África.

La zona de la piscina es espectacular. La piscina propiamente dicha es amplia, está realizada en piedra y tiene una atractiva cascada en su parte superior, pero el entorno es lo que la hace deliciosa. Tiene unos impresionantes vistas al Kilimanjaro y está rodeada de una vegetación exuberante que nos ofrecen bastante sombra natural. Hay bar, servicio de toallas, tumbonas y palapas.

La electricidad no funciona las 24 horas del día, estando operativa por lo menos entre las 5 y las 9 de la mañana, la 1 y las 3 de la tarde, y desde las 6 de la tarde hasta medianoche, que básicamente son las horas en las que podemos encontrarnos despiertos en el lodge, pero que combiene tener en cuenta, sobre todo para cargar bien las cámaras de fotos, sin dejarlo todo para el último momento. En las habitaciones hay disponibles una linterna y velas.

El agua caliente también tiene horario. De 5 a 10 de la mañana, y de 6 a 10 de la noche.

Los móviles tienen cobertura, aunque algunas veces existen dificultades.

En la zona de recepción tienen Wifi, de pago, y en la oficina cuenta con un ordenador con conexión a internet, también de pago.